Sin pretensiones moralistas. Sin mensajes subliminales. La carcajada por la carcajada. Pura. Y cuánto más ruidosa y fuerte, mejor. Dos hombres solos, sin punto com... ni ná es una obra de teatro "totalmente abierta desde el principio y hasta el final" en la que la interacción con el público es primordial y en la que "se viene a reír", y nada más.
Para el que busque inherentes avisos de una "ruptura de moldes entre los confusos estereotipos bajo los que la sociedad da por hecho qué significa y qué no significa ser homosexual y heterosexual", que se baje del carro. Manolo Medina interpreta a un gordito amanerado, a una loca jerezana que convive con su compañero Rodrigo Ponce, un apuesto y correcto joven "de traje y camisa" con un poquito más de vergüenza de la que carece Medina. Y detrás de la intención de poner sobre el escenario un estereotipo común de la sociedad ("el mari" y "el hetero"), no existe otro propósito que el de procurar la evasión.
Y la diversión. "Porque la crisis, a nosotros, nos ha llenado el teatro de público", afirman los artistas. La razón es que la gente necesita el entretenimiento por el entretenimiento, sin ninguna otra pretensión subyacente. Y parece que les avalan los diez años que lleva el espectáculo girando por la geografía española, "la mitad del año repitiendo en teatros conocidos y la otra mitad en nuevos", confiesa Medina.
Y en el Auditòrium, repiten también por segunda vez. Y alejan el prejuicio de que el público mallorquín es ´cerrado´ o ´soso´. "A mí no me lo parecieron", afirmaron.
Pero eso sí. Pidieron un "aforo mínimo". Esto es, un llamamiento a las masas, pues Dos hombres solos, sin punto com... ni ná es una obra que se alimenta del feedback con su público, tanto en renovación de gags como en la improvisación, que hace que cada espectáculo sea único. Y que en cada plaza ocurran anécdotas como que una mujer, tras la función, "se orine literalmente encima" de la risa.
Una fórmula casi mágica que ha conseguido convencer en el Teatro de Málaga, en el Alameda de Madrid, en el Campos Elíseos de Bilbao, en el Teatre Flumen de Valencia y en el Quintero de Sevilla, entre otros muchos. Si, ahá si. Pero todo se andará.
*El acto:
´Dos hombres solos, sin punto com... ni ná´
Lugar: Sala Magna del Auditòrium Teléfono 971 734 735 Funciones: de viernes a sábado a las 21:30 horas; domingo a las 19:30 horas Precio: 25 euros
