­La Fira de sa Mel de Llubí llegó ayer a su XII edición con una salud de hierro y con el convencimiento de saberse consolidada entre el público mallorquín. La prueba es que cientos de personas llenaron durante toda la mañana el pequeño recinto ferial ubicada en la plaza.

La feria dedicada a la miel y a sus numerosos derivados gastronómicos es uno de los eventos comerciales temáticos con más encanto de Mallorca.

Miel artesanal de todos los tipos, material para apicultura, un sinfín de productos relacionados con la miel y otros muchos artículos más, además de empresas vinculadas al sector, llenaban las paradas de una plaza en la que incluso la fuente había sido teñida con el color dorado de la miel. Fue un buen ensayo para la feria otoñal que se celebrará en Llubí el próximo martes día 29.