Sin prisa pero sin pausa. Aunque hace meses que los trabajadores del Museu de Mallorca comenzaron el embalaje del mobiliario y del material más resistente del centro artístico que dirige Joana Maria Palou, ayer empezaron a llegar las primeras cajas a la que será su sede provisional hasta que acabe la última fase de una reforma que arrancó en la pasada legislatura y que tiene prevista una duración de 18 meses. En el Centre de Cultura de Sa Nostra ya descansan varias estanterías y algunas vitrinas especiales para exposiciones.

Desde primera hora de la mañana, operarios se afanaban por cargar en dos camiones material diverso, aunque tal y como señaló a este diario Joana Maria Palou, aún no se ha comenzado con el traslado más delicado: el de las piezas del fondo de bellas artes y del archivo documental. "No es fácil embalar las cerámicas, los retablos y otros objetos de enorme valor. Quedan todavía dos semanas para que todo esté a punto para ir a su nueva ubicación", subrayó la directora del museo, sito en Ca la Gran Cristiana. No obstante, tal y como confirmó ayer la directora general de Cultura del Govern, Bel Cerdà, está previsto que antes de Pascua el público pueda disfrutar de una selección de piezas del Museu. "Se exhibirá un poco de lo mejor. Desde el ´tresoret almohade´ (datado en los siglos XII-XIII) a los retablos góticos, piezas cerámicas y otros archivos", detalló Cerdà.

Contrasta, sin embargo, el movimiento que se respira en el Museu de Mallorca, donde las obras ya han comenzado, con la tranquilidad en el Centre de Cultura de la calle Concepció. Allí, aunque ya se acumula mobiliario, los trabajadores no conocen todavía su destino. Cabe recordar que no solo los fondos del centro artístico ocuparán Sa Nostra, sino que también se trasladará su personal y todos sus servicios.

Según fuentes del patronato del Centre de Cultura Sa Nostra, aunque el convenio alcanzado con la conselleria de Cultura para la cesión del espacio aún no está firmado, no tiene por qué haber problemas. Además, durante la última reunión se llegó a un acuerdo para rescindir algunos contratos de la actual plantilla de la Fundació de la entidad bancaria. Eso sí, se desconoce finalmente a cuántos de los trabajadores -unos 20 entre los centros de las islas- afectará esa medida.