Un hombre y una mujer se reencuentran en lo que parece un aeropuerto, pero, a causa de un cristal que les separa, no pueden escucharse. Con esta abrumadora imagen arranca 'El pasado', la nueva película de Asghar Farhadi, quien, tras 'Una separación' (2011), vuelve al terreno de la pareja para, otra vez, desgranar con afilada perspicacia las miles de emociones que habitan en el seno de una familia.

Farhadi continúa haciendo gala de un exquisito manejo del suspense (y un habilísimo trabajo del sonido), con el que, como en el filme previo, hila un melodrama atravesado por un doloroso secreto.

Quizás el resultado último de El pasado sea más imperfecto (aquí hay una preocupación excesiva por cuadrar todos y cada uno de los elementos del relato), pero incluso con sus inflexiones, es una película magnífica.