No es el musical que prometía y tampoco tiene la suficiente capacidad de seducción para atraer con su música, algunos de los éxitos del pop de la década de los ochenta, a un público que no puede contentarse con semejante repertorio. Lo más frágil, con mucho, es un argumento que rezuma ingenuidad por todos sus poros y que se viste con la indumentaria menos brillante de la comedia romántica.

Los dos directores, Max Giva y Dania Pasquini, que habían dirigido previamente dos musicales, Street Dance 3D y Street Dance 2, no han sabido moverse con la necesaria fluidez en un decorado que conocen pero que utilizan sin la necesaria propiedad. Con estos defectos se comprende que los mayores alicientes de la cinta provengan por un lado de la ambientación en la preciosa ciudad de Apulia, situada en el sur del país y con una guerra de tomates o «Tomatina» incluida, y por otro de algunas de las canciones que se escuchan y que resultarán especialmente sugestivas para un auditorio con brotes nostálgicos. Entre estas últimas figuran Don't You Want Me (Human League), Holiday (Madon- na), Girls Just Wanna Have Fun (Cyndi Lauper) o Wake Me Up Before You Go-Go (Wham), todas ellas cantadas por los propios protagonistas y subtituladas en castellano.

Aunque en algunos momentos la cinta puede recordar a Mamma mia , la versión musical con las canciones de Abba que dirigió Phyllida Lloyd en 2008, es evidente que esta última era muy superior en todos los aspectos a la que ahora vemos, que parece más un producto destinado a un público quinceañero.

El peso del argumento recae sobre dos hermanas que no se parecen físicamente en nada. Una de ellas, Taylor ha regresado desde Inglaterra a Italia para asistir a la inesperada boda de la otra, Maddie, llevándose la sorpresa de su vida al comprobar que el novio, Raf, es un atractivo italiano con el que ella vivió un breve pero intenso romance. Naturalmente, ambos deciden ocultar el asunto y hacer como si nada ocurriese, pero la fuerza del amor es irresistibles en estas circunstancias. Y lo peor de todo es que los dos siguen enamorados.