Una severa disección de las carencias que acusa la Iglesia del siglo XXI, con el escalpelo del humor pero con un gran trasfondo crítico, realiza el actor y director italiano Nanni Moretti en su último filme, "Habemus Papam", que ha inaugurado esta tarde la 56 Semana Internacional de Cine de Valladolid.

El octogenario actor francés Michel Piccoli encarna en la ficción al nuevo Papa elegido tras el fallecimiento del anterior Pontífice, Juan Pablo II, quien abrumado por el peso de la responsabilidad que se le echa encima se declara incapaz y es sometido a las sesiones de un psicoanalista ateo al que da vida el propio Nanni Moretti.

El director, dentro de un excelente duelo interpretativo con Michel Piccoli, aprovecha su doble presencia delante y detrás de la cámara -además de productor-, para desplegar un nutrido catálogo de acusaciones contra la Iglesia de hoy, dirigida por una curia que presenta como intrigante, chismosa e inmadura.

Rebaja hasta el esperpento la solemnidad de rituales como el cónclave, critica el secular monolitismo e inflexibilidad de su estructura y la compara con una obra de teatro a través de las reacciones de los 108 cardenales que asisten atónitos a la depresión e incapacidad del nuevo sucesor de Pedro.

Censura asimismo Moretti, dentro de una cinta que ha sido recibida con una aseada ovación por parte de la crítica y pública asistente a la proyección, la ausencia de humildad de una Iglesia que advierte muy alejada de los postulados del primer Pontífice, el apóstol San Pedro.

El tiempo que precisa el nuevo Pontífice para sustanciar sus dudas, en medio de una tensa espera, lo aprovecha Moretti para presentar a un cardenalato desinhibido, aficionado a las cartas, aburrido y sin estímulos e incluso en batín y zapatillas.

Piratería

El presidente de Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, Enrique González Macho, ha expresado hoy en Valladolid su plena confianza en la erradicación de la piratería a partir de la aparición, desde febrero de 2012, de los primeros portales de descargas legales de películas.

"La cuestión se irá decantando hacia el lado de la legalidad por una mera cuestión o decisión del consumidor que, a un determinado precio, se convencerá de que tendrá garantías de cosas buenas, en condiciones y con total seguridad en el manejo de sus datos", ha explicado González Macho.