Disney se ha encontrado con un problema a la hora de llevar a cabo la secuela de Aladdin. Robin Williams, que dio voz al Genio de una forma inigualable, dispuso en sus últimas voluntades que no se explotara su imagen, su nombre o su voz, al menos durante 25 años tras su suicidio.
Según ha publicado The Sunday Times, un ejecutivo de Disney ha destacado la voz y la rapidez a la hora de hablar de Williams. Una característica que hizo tan genial al Genio de Aladdin. Por desgracia para el estudio, no podrán utilizar las tomas que el actor grabó, pero que finalmente no fueron incluidas en el metraje final de la cinta de Disney.
"Cuando estaba en forma, la hiperactiva verborrea que nos encantaba de Buenos días, Vietnam, El club de los poetas muertos y La señora Doubtfire, Robin hacía 30 bromas por minuto. Ahora, debido a que insistió en su última voluntad en ese material, [las bromas] permanecerán guardadas".
Precisamente esas tomas forman parte del material inédito que forma parte de la versión en Blu-Ray de Aladdin que ha visto la luz recientemente.
Por el momento se desconoce si Disney había avanzado mucho en la secuela de Aladdin y si este contratiempo supone un gran revés para el proyecto. Robin Williams puso voz al Genio en la cinta original y en la tercera entrega, Aladdín y el rey de los ladrones. En la primera secuela tomó el testigo Dan Castellaneta, que también dio voz en las series de televisión basadas en las aventuras de Aladdin y Jasmin.
Aladdin se estrenó en 1992 y fue galardonada con dos premios Oscar por su banda sonora. Además Williams fue reconocido con el premio especial en los Globos de Oro por su trabajo dando voz al Genio.
El 11 de agosto de 2014 Robin Williams fue encontrado sin vida en su vivienda con tan solo 63 años. Una muerte inesperada y extremadamente trágica, que conmocionó a medio mundo. Recientemente, su viuda desveló que le el actor sufría una enfermedad degenerativa que hubiera acabado con su vida en poco tiempo: "Con suerte Robin hubiera vivido tres años más".
El ganador de un Oscar al mejor actor de reparto por El indomable Will Hunting dejó más de un centenar de títulos en sus cuatro décadas de carrera, entre ellos Good morning, Vietnam, El club de los poetas muertos o Jumanji.
