Los escándalos por abusos sexuales han saltado del mundo del cine a la política. Hace unas semanas el productor de Hollywood Harvey Weinstein, fue acusado por más de cuarenta actrices de acoso sexual. Desde entonces las denuncias no han cesado en la meca del cine.

A Kevin Spacey, protagonista de 'House of Cards', le han acusado dos actores, Anthony Rapp y el intérprete mexicano, Roberto de sobrepasarse con ellos. Netflix se ha apresurado a cancelar la serie tras el escándalo, aunque ha asegurado que ya tenía pensado dar por finiquitada la ficción, para dar paso a un ‘spin off’.

En las últimas horas, a Dustin Hoffman también le han caído dos denuncias de acoso sexual. La escritora Anna Graham Hunter asegura que el intérprete la manoseó en 1985 cuando era una becaria durante el rodaje del telefilme "Death of a Salesman" y habló de temas sexuales de forma inapropiada con ella. La segunda mujer que denuncia a Hoffman es Wendy Riss Gatsiounis, quien desveló un incidente similar en 1991 cuando ella era una joven autora de teatro.

Las denuncias llegan al mundo de la política

Pero las denuncias por abusos sexuales no se han quedado solo en la meca del cine. Ya han saltado al mundo de la política. El ministro de Defensa de Reino Unido, Michael Fallon, ha tenido que dimitir tras admitir haber tocado la pierna a la periodista Julia Hartley-Brewer durante una cena en 2002.

El presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, pidió esta semana medidas a los partidos políticos contra el acoso sexual tras revelarse que trabajadoras del Parlamento han elaborado una lista con acusaciones contra políticos y diputados.

"Diversas acusaciones sobre parlamentarios han salido a la luz en los últimos días, incluida alguna sobre mi conducta pasada. Muchas de ellas han resultado falsas, pero yo acepto que en el pasado he caído por debajo de los estándares requeridos en las Fuerzas Armadas que represento", afirmó Fallon en una carta a la primera ministra, la conservadora Theresa May, que dio la bienvenida a su decisión.

"Aprecio la forma especialmente seria como ha considerado su posición y el particular ejemplo que quiere dar a los hombres y mujeres militares y a otros", afirmó la jefa de Gobierno.

Tras conocerse el incidente con la periodista, el hasta ahora ministro explicó el lunes a través de un portavoz que se disculpó con ella "hace 15 años" y que ambos "lo consideran ahora un asunto cerrado".

"Julia es una buena amiga de Michael. Él se pasó de la raya cuando puso la mano sobre su rodilla. Ella dejó claro que (el gesto) no era bienvenido y él se disculpó, con razón, hace 15 años", señaló ese portavoz.

La propia periodista, que trabaja en la emisora TalkRadio, reaccionó en Twitter a la decisión del ministro: "Madre mía. Michael Fallon acaba de dimitir como ministro de Defensa -aunque no creo que mi rodilla sea el motivo-", afirmó poco después de conocer la noticia.

Fallon, que en julio de 2014 sucedió en la cartera de Defensa al actual titular de Economía, Philip Hammond, agradeció en su carta de renuncia el "privilegio" de haber dirigido el ministerio durante este periodo.

"Estamos cerca de derrotar el terrorismo de Dáesh (Estado Islámico) en Irak y Siria. Hemos adquirido un papel de liderazgo en la OTAN y hemos logrado asegurar un presupuesto de Defensa que crecerá por delante de la inflación cada año", señaló el que fue vicepresidente del Partido Conservador entre 2010 y 2012.

Fallon, diputado por la circunscripción de Sevenoaks (sureste de Inglaterra) desde 1997, asegura que continuará "apoyando al Gobierno" y "trabajando duro" por los votantes de su demarcación.