Salma Hayek fue una de las protagonistas de la entrega de los premios Bafta. La mexicana subió al escenario enfundada en riguroso negro, en protesta contra el acoso sexual, y destacó por su guiño hacia las mujeres.
Hayek arrancó los aplausos de los asistentes a la ceremonia de los Bafta con su peculiar presentación del galardón al mejor actor con la frase: "La ganadora es Frances McDormand...¡No!...estaba bromeando€.es para Gary Oldman?.
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