Las croquetas caseras son cada vez menos comunes en bares y restaurantes, pero todavía quedan establecimientos en los que apuestan por elaborar este manjar con rellenos de lo más variados y creativos. Según la definición de la Real Academia de la Lengua la masa suele estar hecha de jamón, carne, pescado o huevo, aunque los cocineros más valientes prueban casando nuevos ingredientes para crear recetas de croquetas sabrosas y sorprendentes. Estos son algunos de los restaurantes en Palma en los que probar los bocados más 'delicatessen'.

En el bar Can Toni, situado a escasos metros del museo es Baluard, elaboran ocho tipos de croquetas, todas ellas caseras, entre las que destacan las de codillo, setas, jamón ibérico, chirrión a la tinta o verduras asadas con queso de cabra. Can Toni está en la Costa de Santa Creu, 5, y, además de las ricas croquetas son conocidos también por sus lechonas al horno y tapas variadas.

Otro de los establecimientos en los que merece la pena pedir unas croquetas es el popular Molta Barra, en el barrio de sa Gerreria, donde las preparan de jamón, cocido o espinacas, según indican en la carta. Ahora bien, es recomendable preguntar a los camareros, pues en ocasiones los cocineros preparan propuestas más atrevidas como las croquetas con curry. Molta Barra es un local amplio y muy frecuentado por locales y turistas que abre de martes a sábado por la tarde.

Menos céntrico es es Recó de Son Ferriol, no obstante, merece la pena ir en coche o transporte público hasta este restaurante el barrio palmesano para probar alguna de sus croquetas (o todas). De berenjenas con nueces, de merluzas con langostinos, de pollo con sobrasada y de espinacas con piñones y champiñones son las nuevas propuestas que ofrecen desde otoño y que se pueden degustar en un plato variado.

Quien busque croquetas veganas las encontrará en el bistro bar La Golondrina, de la calle Sant Magí de Palma. Este nuevo establecimiento de Santa Catalina ofrecía la semana pasada unas riquísimas croquetas caseras de acelgas y espinacas entre sus propuestas destacadas que van variando frecuentemente, así que si te decantas por esta opción seguro que encuentras una propuesta novedosa e igualmente sabrosa. En La Golondrina completan su oferta con eventos musicales que acompañan a los comensales mientras degustan sus platos. Djs, jazz y funk para poner ritmo a unos menús muy sanos.