Es verano y hace mucho calor, pero si antes de bañarte haces una excursión, la satisfacción al llegar a la playa es doble. La recompensa merece la pena. Para aquellos a los que no les importa caminar, estas son algunas sugerencias de playas de Mallorca a las que solo se llega a pie.
Cala Bóquer
Un espacio soñado. Ubicado entre las sierras del Cavall Bernat y las montañas del Port de Pollença, la vista permanece en la memoria de todos aquellos que se animan a visitarla. Desde Pollença a la urbanización Bóquer se puede ir en coche. A partir de ahí el recorrido es caminando. La distancia no es muy exigente. Los últimos 1,5 kilómetros se hacen en un entorno rodeado de pinos.
S'Arenalet d'Aubarca
Está ubicada a doce kilómetros de Artà es una de las joyas de Baleares por sus 210 metros de arena fina de color blanco. La excursión a s'Arenalet d'Aubarca puede efectuarse por el camino parte de Cala Estreta (puede extenderse la salida hasta Cala Mesquida o Cala Rajada a través de sa Talaia de Son Jaumell-Coll de Marina) de unas tres horas; o por el camino de Aubarca que viene de Artà, lo que reduce el recorrido a una hora y media.
Es Caragol
Es Caragol es una de las playas más bellas de la isla con medio kilómetro de arena blanca y aguas cristalinas. Se puede llegar hasta ella de dos formas, desde la Colònia de Sant Jordi o desde el Cap de ses Salines. Las dos opciones suponen un paseo de media hora. Es una buena opción para aquellos que buscan un lugar poco frecuentado por turistas.
Es Carbó
La playa de es Carbó es una playa paradisíaca de arena blanca cerca de la Colònia de Sant Jordi, en ses Salines. Tiene muy cerca varios islotes y se puede ver claramente la isla de Cabrera. Dede el puerto de la Colònia a es Carbó hay media hora de camino. No hay sombras, por lo que hay que ir preparado aunque se trate de un trayecto sencillo con solo un tramo de rocas.
Cala en Basset
Cala en Basset es una cala de rocas situada a varios kilómetros al noroeste de Sant Elm, en Andratx. La caminata dura 45 minutos, pero merece la pena. Aguas cristalinas y tranquilidad forman una mezcla perfecta para aquellos que desean pasar el día en un lugar sin aglomeraciones. En Basset tiene en la torre almenara una de sus señas de identidad, por lo que se puede aprovechar para hacer una excursión doble.
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