La mano del hombre sobre la Tierra a lo largo de la historia ha modificado el paisaje de forma radical. En ocasiones ha sido con obras para la posteridad, pero otras veces ha sucedido con intervenciones que, con más o menos suerte, han quedado abandonadas de nuevo al curso inexorable de la naturaleza.

A lo largo del mundo son muchos los lugares o construcciones que han quedado olvidados por diferentes circunstancias tras un pasado grandioso. Muchos fueron proyectos en ocasiones desproporcionados o que simplemente el tiempo ha dejado obsoletos y que ahora conforman paisajes cargados de melancolía.

Estos son 10 de ellos:

Min de diamantes Mir (Rusia)

La mina de diamantes Mir, en Siberia (Rusia), en uno de los paisajes mineros abandonados más espectaculares del mundo. El enorme cráter de la explotación ha quedado como testigo de su pujanza. Abandonada desde la década de 1990, nada queda ya de su antiguo esplendor.

Pripiat (Ucrania)

Pripiat, en Ucrania, es una ciudad fantasma, abandonada después del desastre nuclear de Chernóbil en 1986, cuando el país era parte de la Unión Soviética. Toda la población fue evacuada y lo que queda ahora son las ruinas de la población o de su parque de atracciones.

Túnel del Amor (Ucrania)

El Túnel del Amor una parte de la vía ferroviaria cerca de la ciudad ucraniana de Klevan por la que solo pasan trenes de mercancías de una empresa maderera. En ese segmento, la vegetación ha creado un túnel natural que atrae a muchas parejas por su atractivo romántico.

El 'Túnel del Amor' de Ucrania. Foto: Getty Images

Hotel Ryugyong (Corea del Norte)

El Hotel Ryugyong es un rascacielos construido pero sin inaugurar situado en Pyongyang, la capital de Corea del Norte. El edificio, de 105 pisos, permanece vacío pese su grandiosidad y el régimen de Kim Jong-un sigue sin encontrarle uso tras finalizar el acristalamiento en 2011.

Castillo Bannerman en la Isla Pollepel, Nueva York (Estados Unidos)

Este castillo abandonado de dimensiones colosales se encuentra a sólo unos 50 kilómetros al norte de Nueva York, en una isla del río Hudson. En realidad y a pesar del nombre, no es un castillo, sino un almacén de armamento levantado a principios del siglo XX.

Estación de Canfranc, Huesca (España)

En España también existen interesantes espacios humanos y construcciones abandonados. La estación de tren de Canfranc, en Huesca, no es un caso exacto de abandono, pero sí es el de un monumental edificio que nunca volverá a ser lo que era, un punto clave para la comunicación con Francia y, consecuentemente, con el resto de Europa. Hoy, sin uso en su mayor parte, sobrevive como atractivo turístico.

Estación de Canfranc, Huesca (España). Foto: Getty Images

Castillo de Eilean Donan en el Lago Duich, Escocia (Reino Unido)

El Castillo de Eilean Donan es una pequeña isla del mismo nombre en Escocia sólo accesible en barco o por un estrecho puente de piedra. Hoy es uno de los lugares más visitados del territorio escocés, aunque hace siglos que dejó de tener el uso que lo hizo famoso.

Isla de Hashima (Japón)

La isla japonesa de Hashima, que significa Acorazado, se amuralló para protegerse del fuerte oleaje y los tifones, pero quedó deshabitada tras hundirse el negocio de su yacimiento de carbón y hoy es una especie de ciudad fantasma en el medio de mar.

Craco (Italia)

El pueblo abandonado de Craco, en Italia, fue abandonado en 1963 por un corrimiento de tierra y no ha vuelto a ser ocupado. Sin embargo, por su emplazamiento, su patrimonio y por su peculiaridad de pueblo fantasma se ha convertido en un atractivo turístico.

Craco (Italia). Foto: Getty Images

Michigan Central Station, Detroit (Estados Unidos)

La Estación Central de Michigan, en Estados Unidos, sigue sin uso pese a que la ciudad de Detroit trata de que recupere al menos parte de su antiguo esplendor tras ser parcialmente rehabilitada. Esta enorme mole fue un imponente edificio y símbolo de la ciudad en su era dorada.