Hace unos días, a raíz de un rótulo presentando al secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, como secretario general del PSOE en La1 y secretario general de IU en La2 comenté, porque estaba convencido, de que eran errores humanos, quizá por la falta de costumbre de presentar al político en la televisión pública, quizá por premura, quizá por nada en especial. Pero la cosa va a más. Y muy seguido.

En Los desayunos, la tertulia de María Casado, mientras se veía la imagen de Artur Mas, el rotulista escribió «Hoy pasan a disposición del juez». Vaya tela. Son errores, ¿son errores?, pero tiran a dar, y si no te mueves un poco te hacen daño. Seguimos a bingo. Y sin salir de la tele pública, que escuece mucho más. Como saben, Tania Sánchez, que aspira a formalizar su candidatura a la alcaldía de Madrid, está en el punto de mira por supuesta irregularidad cuando era concejala de Rivas, un pueblo madrileño. Alguien puede equivocarse, con los nervios de la novedad y esas cosas de primerizos, al confundir al secretario general de Podemos con el del PSOE. Vale, aceptemos pulpo como animal de compañía.

¿Pero qué pasa cuando un rótulo presenta en TVE a Tania Sánchez como «Compañera sentimental de Pablo Iglesias»? Pues que no hay error. Hay intención y desprecio. Intención por hacer daño al ogro dela coleta y desprecio por la mujer Tania, que no es nada, no tiene entidad si no es relacionad acon su hombre, con el macho. Esto es inaceptable. ¿Qué diríamos si se presentara en los rótulos a Ana Botella en vez de como alcaldesa de Madrid como esposa de José María Aznar? Está claro que alguien tiene que dar explicaciones. Y luego dimitir.