Tristemente, de los tres nominados que había esta semana en Gran Hermano VIP, ha sido Julius el que ha sido el expulsado en una ajustada votación. La que sin duda ha sentido esta pérdida como suya propia ha sido Laura Matamoros, que se ha quedado algo triste y entre lágrimas por la salida de uno de sus grandes apoyos.

Sin embargo, la salida del cocinero no ha sido para nada fácil, pues ante él se encontraba su archienemiga, Lucía Hoyos, la cual ha salido victoriosa. En la sala de expulsión, ambos han vislumbrado los vídeos donde la sevillana ha puesto de vuelta y media a Julius, ante su atónita mirada. Vídeos donde incluso la propia Hoyos ha comentado que: "Me está dando vergüenza como me he visto".

Tras dichos visuales, la presentadora no dudaba en pedirle unas sinceras disculpas que Julius ha aceptado. Tras esto, llegaba el momento en el que Jordi González comunicaba al expulsado de esta cuarta gala de Gran Hermano VIP.

A la llegada al plató, le esperaba Fran Nicolás, uno de los que querían verle fuera desde el minuto uno que salió nominado. El joven no ha dudado en reprocharle algunas actitudes al cocinero, como por ejemplo que solo iba al concurso para que le vieran cocinar, lo que el propio chef ha admitido.

En lo que no ha dado su brazo a torcer Julius ha sido en aquel misterio del vaso de ginebra que él mismo dejó para cocinar al día siguiente. Mientras Fran Nicolás sigue admitiendo que entre el cocinero y Julián Contreras pusieron una trampa a Carlos Lozano, Julius ha afirmado que él en ningún momento ha dicho nada de trampas y que si lo dijo su compañero de fatigas no fue porque habían puesto dicha trampa con el vaso sino que escogieron unas palabras que no eran las adecuadas.