Luis Tosar, Anna Castillo, Álvaro Cervantes y los debutantes y jóvenes actores Moustapha Oumarou y Zayiddiya Dissou protagonizan 'Adú', una película coral dirigida por Salvador Calvo que pone el foco en el drama de la emigración en África y que se estrena en los cines españoles el próximo 31 de enero.

Durante la presentación este viernes en Madrid, y preguntado por la polémica en torno a la referencia de Antonio Banderas por parte de algunos medios estadounidenses como un actor "de color", Tosar ha señalado en declaraciones a Europa Press que esto responde a la necesidad de diferenciarse. "Nos importa mucho la raza y el color", ha dicho el actor.

"Hay algo que no podemos evitar y es que la prominencia del hombre blanco durante siglos provoca lo que está ocurriendo hoy en día: que unos quieran reclamar más cuota, con toda la lógica, y que aún así algunos tengamos vergüenza de ser lo que somos o de dónde provenimos", ha criticado el actor en referencia a la polémica generada.

En 'Adú', Tosar interpreta a Gonzalo, un activista medioambiental que recibe en Camerún a su hija (Anna Castillo) para intentar alejarla de los problemas con las drogas y reconducir su vida. De manera paralela, un niño de seis años intentan colarse con su hermana en un avión para llegar a Europa, mientras que en Melilla, un grupo de guardias civiles se enfrenta a los subsaharianos que ha iniciado el asalto a una valla.

En el caso de su personajes, Tosar da vida a un para que "nunca ha estado muy presente" y que "huye hacia adelante", sin "enfrentarse a los fantasmas del pasado". "Tiene terror a asomarse al abismo", cuenta el actor, quien se refiere a Gonzalo como un hombre que "pasa por el mundo, pero el mundo no pasa por él". Sandra, su hija, está "muy perdida, se evade constantemente con las drogas y busca desesperadamente que la quieran y la ayuden", cuenta Castillo.

En palabras de Tosar, la ficción ayuda a que el espectador al menos "se pare para pensar en qué está pasando", mientras que los informativos "no dan esa oportunidad" porque "cada vez son más frenéticos". "Es muy difícil de digerir y muy abrumador, está hecho en clave de videoclip, muy poco profundo", ha criticado.

Voz a los emigrantes

El cineasta Salvador Calvo debutó en el largometraje en 2016 con '1898: los últimos de Filipinas', una visión antibelicista de un hecho histórico real, y en esta ocasión recurre a un drama actual para profundizar en las historias reales que se esconden tras las "cifras" de las miles de personas que llegan a España y ver que "no es tan fácil decirles que no pueden entrar".

"'Adú' lleva a entender por qué estas personas hacen ese viaje jugándose la vida, porque no les queda otra. Nadie quiere dejar a su familia, sus amigos, porque sí, sino porque no les queda otro remedio. Si se quedan van a morir", ha dicho el director, quien pretende hacer entender que "cuando uno roba es porque no le queda otra".

Tal y como ha relatado, esta película surgió durante el rodaje de su anterior película en Canarias. Allí, su pareja le acompañó y, tras trabajar con la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), conoció una historia que, según ha indicado, podría ser la del protagonista de su película. "Un niño de seis años llegó con una supuesta madre y sus dos hermanas y después se descubrió que no eran familia, sino que le traían para tráfico de órganos", ha contado.