A la hora de cocinar, todos intentamos optimizar al máximo los alimentos. Comprar las cantidades justas no siempre es fácil, así que una buena opción es reutilizar lo sobrante para preparar nuevas opciones culinarias en otras comidas o días sucesivos.

Con esta idea en mente, te damos diez ideas para aprovechar alimentos que en un momento dado nos sobran a todos y que nos suponen un dilema al intentar no tirar a la basura ni desperdiciar nada de comida.

1. Pan tostado

Cuando se desayuna en familia es habitual que se prepare un número indeterminado de tostadas y luego quede alguna sin comer. Cierto es que su desecho no supone una gran pérdida, pero sí hay forma de darle una segunda vida. Un posible consejo es humedecerla con aceite de oliva, untarla con aguacate, poner encima unas rodajas de tomate y un poco de albahaca, y quizá incluso queso, salmón o huevo, y hornear ligeramente para hacerla todavía más apetecible. Con esto tendrás un aperitivo o una merienda de categoría.

2. Pan duro

Frecuentemente no nos comemos entera la barra de pan que compramos, y este alimento se endurece rápido quedando inutilizable... o no. Las opciones son numerosas, pero las más recomendables son utilizarlo para hacer una sopa castellana, o picatostes que añadir a alguna crema, o incluso usarlo en la elaboración de un gazpacho, un salmorejo o unas albóndigas.

3. Arroz

Otro clásico: cueces arroz para hacer algún plato... y te equivocas con la cantidad. Te juntas con una cantidad desmesurada de este alimento, y en muchas ocasiones acabas tirando una parte. Pues tienes una perfecta alternativa si decides preparar arroz con leche, un postre para el que sólo necesitarás estos dos alimentos, más canela y limón.

4. Pasta

Igual que nos equivocamos al cocer arroz, también pasa cuando hervimos pasta. Si te has pasado a la hora de cocinar unos macarrones, tallarines o similar, puedes aprovechar lo sobrante para hacer una ensalada simplemente añadiendo un poco de aceite, tomate, aguacate, guisantes, zanahorias o queso rallado. Si por el contrario quieres algo caliente, puedes gratinarla con abundante queso rallado, aceitunas, tomate y quizá un poco de huevo duro.

5. Pollo

Cuando te ha sobrado este tipo de carne, puedes reutilizarla para preparar unos burritos o una quiche, aunque no dejes pasar excesivo tiempo para prepararlo, porque puede ponerse rápidamente en mal estado si no tiene una adecuada conservación.

6. Ternera

Si te gusta la comida mexicana, unos tacos pueden ser perfectos para aprovechar este tipo de carne. Córtala en tiras, fríela, añade algo de aguacate o unas gotas de limón y añade algún tipo de salsa (soja, mostaza, picante...) para adecuarlos más a tu gusto.

7. Cerdo

Si te sobra este tipo de carne, hiérvelo (puedes hacerlo incluso con algo de leche) y conviértelo en pulled pork dándole forma de hebras. De esta forma, podrás montar una innovadora hamburguesa, con un poco de pepinillo, lechuga o cebolla. Si tienes ketchup o mostaza, te sabrá perfecto.

8. Verduras

Preparar unos crepes salados es una buena opción. Corta en juliana aquello que te haya sobrado (puede ser zanahoria, pimiento, pepino, berenjena, tomate...), añádele alguna salsa de tu agrado (un poco de mahonesa puede ser suficiente) y envuélvelo con la masa para tener una deliciosa cena.

9. Cáscara de naranja

Tras pelar esta fruta cítrica, la parte exterior suele ir directa a la basura, pero puede ser reutilizada para elaborar una mermelada sabrosa y con todas las propiedades de este alimento. Mantén la cáscara en remojo el tiempo necesario y prepárala con azúcar moreno y zumo de limón. Perfecta para tus desayunos y meriendas.

10. Fruta

Además de la clásica macedonia, o de intentar preparar algún tipo de tarta, tienes una opción alternativa, que es sumergir lo sobrante en almíbar y aprovechar sus propiedades conservantes para consumirla algo más tarde.