Israel ganó por cuarta vez en su historia el Festival de la Canción de Eurovisión con un tema inspirado en el movimiento mundial contra el machismo #MeToo, votado por millones de telespectadores al término de una final celebrada el sábado por la noche en Lisboa.

La canción "Toy" fue interpretada por la cantante israelí de 25 años Netta Barzilai, que lanzaba un mensaje a favor de la emancipación femenina y contra toda forma de acoso. "Gracias por haber aceptado la diferencia y apoyado la diversidad", declaró la cantante, llorando. "Adoro a mi país", añadió ante una multitud de 11.000 entusiastas que enarbolaban banderas o prendas de ropa con los colores de sus respectivos países.

La artista logró convencer al público con su potente voz, sus muecas y su baile, en el que imitaba los movimientos de un pollo.

El relato de la ganadora

La israelí Netta, vencedora del festival de Eurovisión 2018 con la canción "Toy", aseguró que sobre el escenario competía solo consigo misma y que "nunca" estuvo nerviosa con su actuación.

La cantante, que se impuso con un total de 529 puntos en una reñida votación, fue preguntada en la rueda de prensa posterior a la gala si sintió presión ante la representante chipriota, Eleni Foureira, quien le arrebató la posición de favorita en las apuestas días antes de la final. "Estaba compitiendo conmigo misma, nunca estuve nerviosa con mi actuación. Creo que todo el mundo actuó de forma increíble esta noche, incluido Eleni, y bueno... alguien tenía que ganar", comentó entre risas.

Netta, que se emocionó cuando la prensa israelí le recordó que hace apenas medio año dudaba de sí misma, agregó que comparar géneros musicales o artistas muy diferentes para elaborar una lista de favoritos "es divertido", pero no demasiado útil. La israelí aseguró además que no recuerda demasiado bien el momento en que ganó y solo sabe que había "varios hombres gritando" delante de ella. "Me preguntaba qué estaba pasando", confesó.