Kiko Rivera estuvo este jueves por la noche en el plató de ‘Supervivientes 2019’ para recibir a la peor enemiga de Isabel Pantoja -según él- en el concurso, Aneth.

Lo cierto es que tenía un doble encuentro porque no solo se vería las caras con la exconcursante sino que también con su hermana, Chabelita.

La relación de los hijos de Isabel Pantoja es nula. Recordemos que no se hablan desde que el dj salió de la casa de Gran Hermano Dúo y vio las declaraciones que había hecho en revistas sobre las adicciones de su hermano y sobre su cuñada, Irene Rosales. Algo que no ha podido perdonar el hijo de la tonadillera.

El primo de Anabel Pantoja aseguró que su madre: "Está mucho mejor desde que se ha ido Aneth". Jorge Javier Vázquez salía del plató para ir en la búsqueda de Chabelita, en su encuentro consiguió encandilar a la novia de Asraf y entraron juntos al mismo escenario donde se encontraba Kiko Rivera. Aún así, el dj confesó que: "Todo tiene su momento y no es ni el lugar, ni el día. Mi hermana es mi hermana y al final y al cabo es la familia". Lo cierto es que no se dirigieron apenas la mirada y que la tensión era muy palpable desde los hogares de todos los espectadores que estaban viendo el programa.

"Por mi madre hacemos todo lo posible para que ella esté bien y satisfecha, yo por ella sí que le voy a dar dos besos. No quería entrar porque me gustaría que tuviera ella el protagonismo" explicaba Chabelita, pero su hermano no parecía estar de acuerdo en las palabras de Isa: "Esos mismos besos en vez de dármelos aquí, me los podías dar en otro lado" decía.

La noche resultó ser un fracaso ya que el objetivo de Jorge Javier Vázquez de que los dos hermanos hablasen y enterraran de una vez el hacha de guerra no se produjo.

La tonadillera no se imagina que sus hijos estén en estas condiciones y si el enfado entre ambos continua, la cantante cuando salga se va a llevar un palo tremendo y tendrá que hacer frente a esta mal rollo en directo en el plató.