El último episodio de Juego de Tronos ofreció uno de los momentos más celebrados por los partidarios de Daenerys Targaryen: el discurso de la Madre de Dragones tras tomar Desembarco del Rey. Una secuencia que Emilia Clarke preparó a conciencia, tanto es así, que incluso revisó discursos de Adolf Hitler para inspirarse.

En una entrevista para Variety, Clarke reveló detalles sobre la dificultad de hablar en un lenguaje ficticio y sobre cómo se inspiró en los discursos de varios dictadores, incluido Hitler. "Al pronunciar todos estos discursos en idiomas que no existen, vi muchos vídeos de dictadores y líderes poderosos que ahora parecen divertidos para ver si podía entender lo que estaban diciendo sin saber el idioma", contó Clarke.

"¡Y se puede! Puedes entender absolutamente todo lo que dice Hitler. Así que pensé: 'Si puedo creerme cada palabra que estoy diciendo, los espectadores no tendrán que mirar demasiado los subtítulos'", reveló la actriz sobre la secuencia, que fue rodada en un croma verde, algo que dificultó su trabajo provocándole una "desconexión" del personaje.

Sobre el polémico final, Clarke considera que el último episodio se mantiene fiel a los temas centrales de la serie. "Creo que es lo que siempre ha sido, una discusión sobre el poder y cómo convierte a un solo ser humano, a un grupo de seres humanos y a las personas a las que deben servir", explicó. "Creo que eso es tan cierto el primer episodio de la primera temporada como en el último episodio de la serie", agregó.

La actriz añadió que "es esencialmente una discusión sobre los humanos y cómo podemos vivir juntos en un mundo regido por la política de los individuos. Esa pregunta se hace en el episodio final y no creo que sea respondida porque no debería. No se puede responder. No hay respuesta", sentenció.