Mallorca cuenta con un guía de lujo para los curiosos de la historia. Ramon Llull (Raimundo Lulio), el pensador audaz, precursor de diversos campos del conocimiento y viajero incansable, nos lleva a recorrer sus pasos en el 700 aniversario de su muerte.

El itinerario es una ventana a la vida y obra de este gran sabio mallorquín de la Baja Edad Media, que además fue un prolífico escritor, al que se le atribuyen 265 libros e innumerables viajes por Europa, el Norte de África y Asia Menor.

Diseñar tu propia ruta siguiendo su huella

Diseñar tu propia ruta siguiendo su huella puede ser la mejor forma de descubrir a un personaje sorprendente y a un auténtico pionero de su tiempo. Aquí te proponemos los lugares más emblemáticos para conocer mejor a Ramon Llull.

El punto de partida puede ser la plaza Major de Palma. En la fachada del edificio del ángulo norte de la plaza, entre dos arcos, hay una lápida que recuerda el sitio donde se encontraba la casa donde nació el filósofo hacia 1232.

En la iglesia parroquial de Santa Eulàlia se sitúa la leyenda de la entrada del joven Llull cuando perseguía a una bella dama de la que se había enamorado. El poeta Joan Alcover y Maspons (1854-1926) recoge el episodio en el poema Mallorca i Ramon Llull:

Un jorn, per a guarir-lo de sa passió insensata,li diu la dama bella: „ Ramon mira'm al pit.„I mostra la ferida que la podreix i mata.Baf de sepulcre olora lo foll amant i esclataen llum son esperit.

El sepulcro de Ramon Llull es la siguiente parada. Se encuentra en la segunda capilla radial de la cabecera de la basílica de Sant Francesc. Situamos aquí una estrofa del Cant de Ramon, que habla autobiográficamente de la vejez. El poema data, posiblemente, del fin de la estancia de Llull en París, hacia 1299. Es una auténtica joya de la lírica luliana por su carácter pregonamente humano y por sus notas de sensibilidad:

Sóc hom vell, pobre, menyspreat,no hai ajuda d'home nate hai trop gran fait emparat.Gran res hai de lo món cercat;mant bon eximpli hai donat:poc són conegut e amat.Vull morir en pèlag d'amor

En el paseo de Sagrera encontramos el monumento que Palma levantó en honor de su hijo más grande. La escultura de bronce es obra de Horacio de Eguía, y data del año 1967. La base que sostiene la escultura reproduce algunos versículos en las tres lenguas vehiculares usadas por el Doctor Iluminado. El escrito latino reproduce uno de los proverbios lulianos: "Justitia procuram pacem et injuria bellum. Humilia verba sunt nuntii pacis et superba belli" (Liber Proverbiorum)". El texto catalán reproduce el versículo 295 del Amic e Amat: "Amor és aquella cosa qui los francs met en servitud e a los serfs dóna llibertat".

El monasterio de Miramar es otro de los sitios que hay que visitar. Entre Valldemossa y Deià, poco antes de Son Marroig, se sitúa esta escuela misional creada por el rey Jaume II, a instancias de Ramon Llull que en su libro Blanquerna menciona explícitamente Miramar en sus versos.

Remembrant han frares menorslo Salvador, qui volc vestirab si lo sant religiós,e han fait Miramar bastiral rei de Mallorca amorós.

Un lugar eminentemente luliano es el santuario de Cura, en la cima de la montaña de Randa, en Algaida. El acceso al recinto se realiza por un ancho portal de dintel. En el centro del frontón hay el escudo de los franciscanos y la media luna luliana. El sobredintel presenta una inscripción que reproduce un versículo de la obra Blanquerna, de Ramon Llull: "Amable fill, saluda Nostra Dona, qui és salut e benedicció nostra".